Pasadas las medidas de aislamiento, los niños fueron los primeros asustados que han perdido el equilibrio que llevaban en sus vidas. A pesar de que los colegios se esfuerzan por continuar con su programa académico de forma virtual y presencial en algunos casos, es normal que en ciertos momentos los niños se aburran.
– Orar. Una pequeña lectura devocional sobre el amor y la protección de Dios y una oración poderosa (no eterna) pueden ayudar a los niños a depositar en Él su ansiedad y respirar tranquilos.
– Hacer una torta. O una pizza, o una ensalada de frutas. Invéntense una deliciosa receta con lo que tengan en casa. Cocinar es una actividad de aprendizaje y diversión.
– Teatro de sombras. Recorta siluetas de cartulina y pégalas en un palo. Saca la linterna y… ¡que se haga la magia!
– Juegos de mesa. El tradicional parqués, parejas, adivinar los gestos o dibujos, monopoly, rompecabezas, etc. Aprovechen para compartir juntos y reírse un rato.
– Un día de spa. Háganse peinados, píntense las uñas, inventen mascarillas, en fin. Es mucho lo que se puede hacer y ojalá de forma poco convencional.
– Post-it escondidos. Pequeños mensajes escondidos con palabras de afecto e incluso con chistes en los lugares menos esperados podrán alegrar el día de quien los encuentre.
– Redecorar. Es buen momento para darle un nuevo aire a las habitaciones de cada uno, incluso para limpiar y encontrar esas cosas que están en buen estado y se pueden regalar.
– Inventa una canción. Cambia la letra de una canción de moda por algo chistoso. Aprovecha y ponle una coreografía divertida.
– Doblaje. Pongan una película en silencio y graben un video cambiando los diálogos por conversaciones graciosas.
– Dibujar retratos. Uno posa y los demás le dibujan. ¿Cuál quedó más gracioso? ¿Cuál se parece más?
– Picnic en la sala. Desayunen o tomen onces en la sala. Solo necesitan un mantel y un poco de imaginación.
– Camping en la sala. O en la alcoba de los papás… puede ser una noche diferente.
– Comics caseros. Inventen una historieta divertida con los miembros de la familia y conocidos. Les sorprendería saber cuántas películas nacieron así.
– Búsqueda del tesoro. Escondan un premio mayor y pistas por toda la casa. Una pista lleva a la otra… ¿Serán capaces de encontrar el tesoro?
– Escribir un diario. Conversen sobre cómo cada uno está llevando la cuarentena y escríbanlo en familia. Hoy parece poca cosa, pero luego será interesante leerlo. Pueden incluir promesas bíblicas cada día.
Foto: Michał Parzuchowski – Unsplash