Masculinidad bíblica ¿en crisis?

por Revista Hechos&Crónicas

Por ningún motivo podemos decir que Dios se equivocó cuando creó al hombre y a la mujer. El diseño original es perfecto. Sin embargo, hoy existe una clara distorsión, y la masculinidad se ha visto afectada por mentiras y falsas creencias. ¿A dónde hemos llegado?

Génesis 1:27 dice: Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó… En este sentido, existen parámetros biológicos y sociales que diferencian a ambos sexos. Hechos&Crónicas habló con el psicólogo cristiano Rafael Narváez Dávila, de la Universidad Externado de Colombia quien explica con claridad cómo la figura masculina se está desdibujando y va por rumbos equivocados.

H&C: ¿Qué ha establecido Dios para el hombre según su diseño original y que se ha desfigurado hoy?

R.N.D.: Génesis 5:2 es claro: Los creó hombre y mujer, y los bendijo. El día que fueron creados los llamó «seres humanos». Esta afirmación para muchos parece que está incompleta, pues se argumenta que “el género concebido como masculino y femenino no está dado por la naturaleza, sino que es una construcción social”, es decir, que la masculinidad responde más a los esquemas culturales que a la biología misma.

¿Por qué muchos hombres no se comportan como hombres?

Porque muchas veces no tienen un referente claro de lo que es ser hombre (sabemos que el modelo ejemplar es Jesús: verdadero Dios y verdadero hombre) y, por lo tanto, replican las conductas/costumbres que se arraigan en la sociedad en la que viven. Según un estudio de East Tennessee State University, cinco a 14 de cada 1000 personas que nacieron hombres, sufren disforia de género, lo que indica que tienen sentimientos de angustia o dificultad funcional significativa y creen que su sexo al nacer no coincide con su sentido interno de percibirse como hombres.

Vemos que en nuestro entorno hay hombres que dudan de su masculinidad, pero el problema no radica en encontrar dicha identidad, la cuestión está en reconocer que su diseño original le pertenece a Dios y Él es el único que puede orientarlos para hacer su voluntad siempre buena, agradable y perfecta.

¿Qué distorsiones hay?

Hoy en día es más hombre el que cumple con ciertos “estatutos” pero no es visto por su corazón y fuerza interna. Por ejemplo, dice que un hombre es “más hombre” cuando toma trago y está con mujeres. Eso claramente anti bíblico. También vemos que la masculinidad se mide con factores físicos, quién tiene más masa muscular, más logros, etc., y la verdad es que ser hombre implica cosas más profundas. Estas distorsiones se deben a la falta de afirmación en el rol del hombre como estructura de Dios.

¿Qué atributos específicos Dios le ha asignado al hombre?

Teniendo en cuenta que el mejor referente de masculinidad es Jesús, quiero explicar los atributos del hombre de la siguiente manera:

  • Sabio: La masculinidad bíblica conlleva tener claridad y poner en práctica los principios de Dios para asumir con valor y lealtad lo que Él ordena en su Palabra.
  • Valiente: Josué 1:9 dice “sé fuerte y valiente”. La valentía es un elemento vital de la masculinidad, con ella se han logrado conquistas y avances importantes para el progreso de la humanidad a lo largo de la historia.
  • Amante: La masculinidad bíblica no está completa sin amor y se manifiesta mediante ternura, cuidado y protección al hogar (esposa, hijos y personas de su entorno social).
  • Sacerdote del hogar: En el ámbito familiar, la Biblia indica que todo padre hablará a sus hijos acerca de la fidelidad de Dios (Isaías 38:19).
  • Amigo: También implica la capacidad de tener y ser amigo, lo cual refleja el carácter de Jesús cuando nos llamó amigos (Juan 15:15).

¿Cómo afianzar la masculinidad en esta época?

Hubo un hombre sobre la tierra que ejemplificó los rasgos de la hombría que tanta falta hacen hoy día. Un hombre que cambió el rumbo de la historia y nos dio una esperanza por la que vivir, luchar y amar, Él es Jesús.

En línea con lo anterior, el consejo que puedo dar a los jóvenes es que sigan a Jesús y lo busquen. Es necesario tener la guía del Espíritu Santo para no caer en las distorsiones actuales. Jóvenes, lean la Biblia diariamente, rodéense de personas que compartan las mismas creencias y la fe, eviten entornos donde se pueda vulnerar la identidad que Dios nos ha dado y afiancemos nuestra masculinidad.

Foto: Diogo Brandao – Unsplash (Foto usada bajo Licencia Creative Commons) 

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