¿Alguna vez te has preguntado por qué lo amas tanto?, ¿por qué es tu superhéroe favorito? Aunque existan miles de razones para honrarlo, aquí te mostramos algunas…
1- Cuando nací, me alzaste en tus brazos, me miraste, te sonreí y vi tu cara llena de felicidad. Te convertí en el papá más feliz del mundo.
2- Fuiste quien me enseñó a caminar. Cuando viste mis primeros pasos, tus ojos se llenaron de lágrimas y me recibiste en tus brazos con amor.
3- Me enseñaste a montar en bicicleta. Tuviste mucha paciencia, me cuidabas para evitar que me cayera. Si pasaba, me sacudías y curabas mis raspones. Me animabas a no desfallecer.
4- Muchas veces dejaste tus ocupaciones para estar conmigo, ver tele o hacer siestas.
5- Siempre me aconsejaste y me abriste los ojos para no cometer errores.
6- Me enseñaste a ahorrar. Gracias por las alcancías, las billeteras y esa plata que a veces me dabas para que algún día me comprara algo.
7- Tuve el honor de tenerte presente en mi graduación. Sé que te sentiste muy orgulloso de mí.
8- Cuando íbamos de paseo a la piscina, me prometiste que me enseñarías a nadar y gracias a ti soy un pez en el agua.
9- Cuando de leer se trataba, fuiste el primero en acomodarse en el sofá para escuchar las mejores historietas.
10- Cuando tuve problemas, me abrazaste, me dijiste que todo estaría bien, y no te importó que llenara de lágrimas tu ropa. Gracias por consolarme.
11- Cuando jugabas conmigo siempre me divertí hasta el cansancio. Gracias por correr, saltar y por convertirte en mi caballo preferido.
12- Cuando enfermaba, estuviste pendiente. Le diste ánimo a mamá para que no se preocupara.
13- Me apoyaste siempre en mis decisiones, me dijiste que no importaba lo que quisiera ser cuando grande, siempre y cuando fuera lo mejor para mí.
14- Me enseñaste a luchar por mis sueños y a ser independiente.
15- Siempre dijiste que darías la vida por mí sin pensarlo dos veces.
16- Me enseñaste a depender de Dios y a confiar en Él.
17- Contigo aprendí a perseverar y a ser esforzada.
18- Amaste siempre a mi mamá y la hiciste muy feliz.
19- El día que me casé, fue tal vez el más difícil de tu vida, pero hoy eres feliz por esos nietos que te aman.
20- Contigo puede conocer de Dios, gracias porque me enseñas que cuando no estés, Él siempre estará con nosotros porque somos sus hijos consentidos y amados. Papito, gracias por ser mi héroe y hacerme saber que puedo llegar tan lejos como tú.
Foto: Juliane Liebermann – Unsplash